Beneficios de los campamentos de verano para las habilidades sociales de los niños y niñas
Un campamento de verano es un momento único en el que los niños y niñas se divierten y disfrutan de su ocio. Pero hay muchos motivos, más allá de los lúdicos, para que los papás y mamás decidan enviar a un campamento de verano a sus hijos.
En Arkhe trabajamos con un proyecto educativo que está presente en cada una de las actividades del campamento. Uno de los pilares de este proyecto es el desarrollo de las habilidades sociales de los niños y niñas.
El desarrollo de las habilidades sociales de los niños y niñas
La capacidad de saber relacionarse con otros será de grandísima utilidad tanto durante la infancia y la adolescencia como en la vida adulta. Por eso, la comunicación, asertividad, empatía y resolución de conflictos son algunos de los puntos que que se abordan durante su estancia en nuestros campamentos y que podrán practicar con sus nuevos amigos.
¿Cuáles son las habilidades sociales que pueden desarrollar los niños en un campamento de verano? Sobre todo, las siguientes:
- Inteligencia emocional. Se trata de la capacidad de controlar los sentimientos y las emociones propias, así como entender las de los demás. Los monitores y monitoras trabajan en las actividades para que los peques se conozcan mucho mejor y aprendan a entenderse y entender a los demás. Identificar qué te pasa y saber gestionarlo es una de las cosas más fundamentales que los niños deben aprender. Reconocer las emociones propias y actuar en consonancia son habilidades que se desarrollan en los campas a través de dinámicas y talleres que les permitirán abrirse a sus compañeros sin vergüenza, además de aprender de las emociones del resto.
- Comunicación asertiva. Es la habilidad para exponer opiniones con respeto. Muchas actividades en los campamentos Arkhe están pensadas para mejorar la capacidad de comunicación de los niños y niñas.
- Empatía y escucha activa. Otra de las ventajas de un campamento es que rompe la barrera de la edad y la homogeneidad del colegio. Eso significa que ofrece a los niños y niñas la capacidad de empatizar y conocer otras realidades.
- Toma de decisiones meditadas. Cuando los peques están en un campamento, su autonomía vive un crecimiento impresionante. En este contexto, la mejora de la capacidad de tomar decisiones meditadas aumenta también exponencialmente.
- Trabajo en equipo. En los campamentos, se realizan muchas actividades y juegos en grupo donde a menudo los niños tienen que confiar en sus compañeros de equipo para completar un ejercicio. Así, de una forma divertida, aprenden a valorar el esfuerzo de otros, y se forman vínculos y fortalezas que serán muy positivos en su desarrollo y relaciones futuras.
Campamento de verano: una gran oportunidad de hacer nuevas amistades
Los niños y niñas socializan continuamente, sobre todo en el ámbito escolar. Pero suele ocurrir en un entorno controlado, en el que lo primordial no es socializar, sino aprender algún conocimiento. Esto cambia en los campamentos de verano, donde socializar pasa a ser una de las cosas más importantes.
En el campamento, todas las actividades ayudan a que los niños interactúen, socialicen, compartan y convivan de forma saludable. Y esto es un aprendizaje para toda la vida.